La ecografía aplicada a la medicina estética es cada vez más fuerte, se ha convertido en una herramienta no invasiva que permite evaluar y dar un diagnóstico más preciso a la hora de cualquier procedimiento médico estético.
Entre las cosas más sonadas últimamente cuando hablamos de ecografía en medicina estética, es la llamada ecografía facial, entre sus principales usos y características tenemos las siguientes:
- Imagen en tiempo real, por lo tanto se tendrá un diagnóstico inmediato
- Permite mapear y ver el estado de los rellenos inyectados en el pasado
- Punción eco guiada para mayor precisión a la hora de inyectar cualquier tipo de relleno
- Evaluación de tejidos y estructuras faciales para determinar la profundidad y zona óptima de la cara donde se quiere inyectar un relleno dérmico
- Conocer qué tipo de relleno dérmico tiene el paciente
- Seguimiento de resultados para ver como va progresando el tratamiento
- Detección de vasos sanguíneos y nervios para evitar cualquier riesgo a la hora de inyectar rellenos dérmicos
¿Qué debe tener un ecógrafo para medicina estética?
Debe estar equipado de una sonda lineal con frecuencias altas para tener una buena imagen de los tejidos más superficiales.
La ecografía en medicina estética es usada frecuentemente en el rostro y zonas muy superficiales. Dependiendo del caso, una sonda abdominal también será útil según el estudio a realizar, permitirá ver a mayor profundidad zonas como abdomen, piernas, etc.
Existen variedad de ecógrafos, más allá de calidad de imagen, distintos softwares como elastografía, resalte de aguja, etc. y variación de sondas, es necesario estudiar y tener bien claras las necesidades de la clínica para dar con el equipo acertado.
Entre ellos encontramos, ecógrafos de consola, ecógrafos portátiles y sondas inalámbricas diseñadas específicamente para atender las necesidades de la ecografía facial.
En TMA MÉDICA estaremos encantados de aclarar cualquier duda y organizar una demostración sin compromiso del equipo seleccionado.